La evolución de las muñecas hinchables en el mundo de las tiendas eróticas
Se ha podido tener algunos registros que constan que las muñecas hinchables aparecieron para el siglo XV y se decía que eran utilizadas por los hijos de los adinerados terratenientes para que pudieran entrenar en el arte de hacerle el amor a una dama. Las primeras muñecas hinchables fueron fabricadas de trapo y eran una réplica en tamaño más o menos original de la figura femenina pero se hacía énfasis en los orificios corporales normales como boca, vagina y ano. En ese momento no había comercialización de muñecas hinchables y tiendas eróticas no existían en aquella época, como para hacerlas un producto de fácil adquisición así que su elaboración era totalmente artesanal.
Las muñecas hinchables tal y como las conocemos en el presente tienen su origen en los años 30 específicamente en Alemania y eran utilizadas por el ejército para aliviar de la soledad a los soldados que zarpaban en largas misiones y que no tenían contacto alguno con la presencia femenina. La función de estas muñecas eran básicamente servir de consoladores para los soldados de la época.
A través de los años se fueron utilizando otro tipo de materiales pero el resultado fue que las muñecas terminaban siendo poco agraciadas y estaban hechas de vinilo (material que resultaba toxico para el organismo) con costuras alrededor que muchas veces explotaban en manos de su dueño debido a la unión del material. Hoy en día ha evolucionado la forma de integrar materiales no tóxicos a la elaboración de las muñecas hinchables al punto que las diferentes casas que las fabrican viven en una constante competencia para ver quien logra hacer la muñeca más semejante a una mujer y que luzca lo más humana posible. En la actualidad Japón ha llevado la delantera en cuanto a la humanización de las muñecas hinchables produciendo un robot prototipo que fácilmente pasaría desapercibido hasta para el más experto.
A través de la historia la comercialización de estos juguetes sexuales ha evolucionado así como también su modo de fabricación. Mientras que en la segunda guerra mundial Hitler mandó a fabricar cientos de muñecas para poder surtir a su ejército, en algunos lugares era un gusto que podían disfrutar solo los ricos, y es allí cuando entran en escenas las tiendas eróticas.
Curiosamente la aparición de la primera tienda erótica también tiene su origen ligado a Alemania ya que en el año de 1962 la refugiada alemana Beathe Uhse abre la primera tienda erótica en Estados Unidos. Era de imaginarse que en ese momento a pesar de ser un grandioso éxito los artículos que se vendían eran destinados casi en su totalidad para el uso de los caballeros.
Pero la relación entre las muñecas hinchables y tiendas eróticas vienen dadas de la mano porque una no resulta sin la otra, de los juguetes sexuales más solicitados por los clientes la muñeca hinchable es la que encabeza la lista de los artículos más solicitados, donde hoy en día cada vez se usa más para mundo del erótisco y la diversión entrando aquí.